El lomo de cerdo y sus elaboraciones
El lomo de cerdo, raxo como lo llamamos en Galicia, esa pieza a la que algunos tachan de carne seca por un mal cocinado, la de elaboraciones que nos permite en carnicería y la variedad de recetas que puedes elaborar con él siempre y cuando ¡¡¡lo cocines bien!!!
Además, dependiendo de su elaboración, te olvidarás de contar calorías porque no tiene grasa, es una carne totalmente magra ¿a que ya te va gustando más?
Es rico en proteínas, fósforo, vitamina B1 y colina esenciales para nuestro organismo siempre que sigamos una dieta variada.
En Carnicas Anzo trabajamos mucho el lomo de cerdo por las variadas elaboraciones de sabores diferentes que nos permite, por eso lo puedes encontrar:
1. Fresco para filetes, chuletas, brochetas… Evita que te quede seco siguiendo estos consejos de El Comidista https://bit.ly/2zsz8ER y disfrutarás de una carne jugosa y tierna.
2. Fresco y adobado con el adobo casero que preparamos nosotros mismos. ¿Qué cómo es? Seguramente conoces el lomo adobado de marcas tan conocidas como El Pozo, pues se trata del mismo tipo, solo que el nuestro es 100% natural, sin conservantes, colorantes ni otros aditivos.
El adobo le aporta jugosidad y un sabor más intenso.
Puedes freírlo en filetes a la plancha o en la sartén, hacerlo en taquitos para ensaladas, para acompañar pasta, arroces, etc…
3. Lomo curado embuchado de cerdo, la delicatessen de los embutidos por su alta calidad. ¿Cómo se hace? Seleccionamos lomos frescos de cerdo que adobamos con adobo preparado al momento, se embuchan y se llevan al secadero, donde están unos tres meses curándose. El resultado es un embutido muy sabroso.
Este embutido suele confundirse a veces con su primo hermano, el cabecero de lomo, de aspecto similar, pero se diferencian claramente, el cabecero tiene una veta de grasa que no contiene el lomo, además el cabecero se hace con la aguja no con el lomo de cerdo.
Puedes incluirlo en tablas, en bocadillos, tostas, ensaladas…